La obesidad en los gatos y cómo poner a dieta a un gato

Si la obesidad en los gatos te preocupa por si tu minino la sufre, vamos a ver cómo poner a dieta a un gato y te vamos a dar algunos consejos de salud
brown tabby cat lying on gray concrete floor

Obesidad en los gatos y cómo poner a dieta a un gato

Si hablas con cualquier veterinario probablemente te dirán que cada vez ven más gatos obesos y con sobrepeso por diversos trastornos. Esto se debe a que los gatos con sobrepeso superan en número a los gatos de peso normal.

Dicho esto, vamos a analizar la obesidad en los gatos con más detalle. Explicaremos cómo saber si tu gato tiene sobrepeso o no, y te daremos algunos consejos sobre cómo ponerlo a dieta. Dicho esto, sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber.

Cómo saber si tu gato tiene sobrepeso

La obesidad se produce cuando un gato consume más calorías de las necesarias para cubrir sus necesidades energéticas diarias. Cuántas calorías necesita consumir tu gato dependerá de su tamaño. Por supuesto, pesar a tu gato y averiguar si tiene el tamaño adecuado en relación con el peso medio para esa raza es un buen punto de partida.

El peso medio de un gato doméstico de pelo corto oscila entre 2,5 y 4 kilos. Sin embargo, hay otros indicios de que tu gato tiene sobrepeso. Por ejemplo:

  • No puedes sentir el contorno de las costillas de tu gato si pasas suavemente las yemas de los dedos contra la dirección del pelaje.
  • No puedes sentir la hendidura de la cintura si alisas el pelaje, pasando las manos por los costados de tu gato.
  • Tu gato tiene una barriga flácida.
  • Tu gato tiene problemas de movimiento o de salud.

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Riesgos de la obesidad en los gatos

Existen diversos riesgos asociados a la obesidad en los gatos. Entre ellos se incluyen los siguientes:

  • Los gatos con sobrepeso podrían tener una función inmunitaria disminuida, una posible mayor probabilidad de algunos cánceres, flatulencia y aumento del riesgo de estreñimiento, así como un mayor riesgo de piodermas en los pliegues cutáneos.
  • Los gatos con sobrepeso presentan un mayor riesgo quirúrgico. Esto se debe al impacto que la obesidad puede tener sobre la función pulmonar y cardiaca. Los fármacos anestésicos, por ejemplo, podrían no metabolizarse adecuadamente debido a una función renal o hepática comprometida. Esto podría aumentar el riesgo de sobredosis de fármacos anestésicos. Además, el cirujano puede tener dificultades para alcanzar el objetivo quirúrgico debido a las gruesas capas de grasa.
  • Los gatos con sobrepeso tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades del tracto urinario.
  • La obesidad puede predisponer a los gatos a la lipidosis hepática, que es una enfermedad potencialmente mortal.
  • La grasa en el abdomen y el pecho puede restringir la capacidad de expansión de los pulmones, lo que dificulta la respiración del gato.
  • La obesidad en los gatos puede conducir a la diabetes mellitus, que se produce porque la capacidad del cuerpo para utilizar o producir insulina es superada por la necesidad del cuerpo de la misma. Si tu gato padece diabetes, puedes considerar la posibilidad de darle comida para gatos diabéticos.
  • Los gatos con sobrepeso también pueden suponer una carga adicional para su corazón al desarrollar hipertensión arterial. Esto significa que el corazón tiene que trabajar más para bombear sangre a todo el tejido corporal adicional.
  • El aumento de peso puede suponer una carga excesiva para los ligamentos, tendones y articulaciones, lo que puede provocar cambios artríticos en algunos casos. Saltar desde un lugar alto puede ser especialmente duro para las articulaciones de tu gato.
  • Los gatos con sobrepeso pueden no vivir tanto como si tuvieran un peso saludable.

Consejos básicos para ayudar a adelgazar a tu gato

Antes de profundizar en cómo puedes poner a tu gato a dieta, veamos algunos consejos y trucos básicos para adelgazar que puedes utilizar:

  • No permitas que tu gato tenga acceso a comida para perros.
  • No compartas comida humana con tu gato. No sólo engorda, sino que puede provocar diarrea en tu gato también.
  • Evita dar golosinas a tu gato.
  • Establece un objetivo de pérdida de peso con el veterinario.
  • Deja de lado la comida para gatos durante un tiempo limitado.
  • Mantén lleno el cuenco de agua de tu gato.
  • Mide la comida que come tu gato. Divide la ingesta calórica prevista para tu gato en cuatro o seis comidas pequeñas.

Cómo poner a tu gato a dieta

Ahora que comprendes por qué es tan importante combatir la obesidad en los gatos, veamos las distintas formas de poner a dieta a tu gato…

  • Colabora con tu veterinario – Sólo hay un lugar por el que empezar, y es colaborando con el veterinario. Es sumamente importante que consultes a un especialista cuando se trate de problemas de control de peso, sobre todo si tu gato tiene un sobrepeso considerable. Tu veterinario te ayudará a elegir las cantidades adecuadas de pienso y la mejor comida para gatos para perder peso. Después de todo, lo que funciona para un gato no será necesariamente la mejor opción para otro. El veterinario también podrá controlar la pérdida de peso de tu gato para asegurarse de que la dieta elegida es eficaz. Podrá hacer ajustes y cambios cuando sea necesario.
  • Alimenta a tu gato con la cantidad adecuada – Uno de los mayores errores que cometen los dueños de mascotas es la alimentación libre. Esto no ayuda a perder peso en los gatos ni en ningún otro tipo de mascota. Podrás hacer un seguimiento de cuántas calorías consume tu amigo felino si mides las comidas. Por supuesto, calcular exactamente la cantidad de comida que debe tomar tu gato puede resultar difícil. Esto se debe a que las necesidades calóricas varían en función de cada gato, así como de su edad y estilo de vida. Además, las calorías no siempre están claramente indicadas en las etiquetas, por lo que hay que ser inteligente a la hora de comprar. No te limites a suponer que los alimentos para gatos de naturaleza similar van a tener más o menos el mismo número de calorías.
  • Elige el pienso adecuado para tu gato – Como ya se ha mencionado, tu veterinario podrá ayudarte en esta tarea. No obstante, debes saber qué debes buscar al comprar comida sana para tu gato. Debes buscar alimentos con un contenido moderado o bajo en calorías y alto en proteínas. Los gatos necesitan carne, y en buena cantidad. Esto se debe a que son carnívoros obligados. Muchos alimentos dietéticos contienen una gran cantidad de carbohidratos, que no son ideales para la pérdida de peso felina. Además, muchos de los alimentos enlatados disponibles tienen menos carbohidratos y más proteínas que la comida seca para gatos. Sin embargo, esto no significa que no puedas encontrar alimentos secos bajos en carbohidratos y ricos en proteínas. Se trata de ser inteligente a la hora de elegir.
  • Recuerda, una guía de alimentación es sólo eso – Cuando compres comida para tu gato, es probable que venga con recomendaciones sobre la cantidad que debe comer. Sin embargo, es importante recordar que cada gato es diferente y que estas guías de alimentación son exactamente eso: una guía muy aproximada. Además, las guías de alimentación están dirigidas a gatos que ya tienen un peso saludable. No están diseñadas para ayudar a perder peso.
  • Deja las golosinas para más tarde – Ya sabes lo que dicen: hay que ser cruel para ser amable. Sí, puede que te sientas mal porque tu gato ya no reciba golosinas, pero lo haces por el bien de su salud. Las golosinas para gatos comerciales son poco nutritivas y muy calóricas, lo que significa que no sirven de nada cuando tu gato está intentando perder peso. ¿Por qué no sustituyes las golosinas por algo más nutritivo?
  • Intenta perder peso lentamente – Aparte de los puntos ya mencionados, es importante que no esperes que tu gato pierda mucho peso a un ritmo rápido. Tu gato podría ponerse muy enfermo si pierde peso demasiado deprisa. La pérdida de peso debe ser constante y lenta, con reevaluaciones periódicas por parte del equipo veterinario para asegurarse de que tu gato no está perdiendo músculo. Tu gato no debería perder más de un dos por ciento de peso por semana.

No a las dietas de choque

Una cosa que no debes hacer nunca es intentar someter a tu gato a una dieta de choque. En un intento de hacer que tu gato pierda peso, puedes racionar su comida drásticamente. Sin embargo, esto puede provocar graves problemas de salud, por lo que nunca debe hacerlo.

Si reduces la ingesta de alimentos de tu gato en más de un 10 ó 15 por ciento, le privarás del equilibrio correcto de vitaminas y minerales esenciales, y esto podría provocar lipidosis hepática y otros problemas potencialmente peligrosos. Para los que no lo sepan, la lipidosis hepática es una afección grave del hígado, que a veces puede ser mortal, y puede deberse a una restricción alimentaria.

Cómo hacer que tu gato sea activo

Es importante reconocer que la alimentación es sólo una parte del rompecabezas cuando se trata de combatir el problema de obesidad al que se enfrenta su gato. El estilo de vida que lleva tu gato también influirá enormemente en su peso, al igual que ocurre con los humanos.

En particular, la falta de ejercicio puede ser un verdadero problema. Hay varias medidas que puedes tomar para animar a tu gato a ser más activo:

  • Cuando alimentes a tu gato, puedes ponerle una parte de su ración diaria en una pelota especial. Esto significa que tendrá que hacer ejercicio y moverse para acceder a su comida. También puedes poner la comida encima de una torre de escalada o en lo alto de las escaleras para que tu gato se mantenga en movimiento.
  • Si tu gato está encerrado en casa de forma exclusiva, deberías pensar en permitirle salir al exterior. Puede que quieras construir un corral o vallar tu jardín para asegurarte de que tu gato está seguro.
  • Los árboles para gatos con rascador fomentan el ejercicio y además hacen que el entorno de tu gato sea mucho más interesante.
  • Utiliza un juguete de «pesca» o anima a tu gato a perseguir una pelota mientras juega. Un tiempo de juego dedicado puede marcar una gran diferencia.

¿Qué pasa si la dieta no funciona?

Si has puesto a tu gato a dieta, siguiendo los consejos anteriores, y tu gato no pierde peso, lo más probable es que siga consumiendo demasiado. Pero si estás seguro de que no es así y no sabes qué hacer a continuación, lo mejor que puedes hacer es concertar una cita con el veterinario.

¿Debes dar a tu gato suplementos como minerales y vitaminas?

La respuesta corta a esta pregunta es no. Esto se debe a que una buena comida para gatos contiene todos los minerales y vitaminas que tu gato necesita. Nunca debes utilizar suplementos a menos que tu veterinario te lo haya indicado.

En definitiva, no se puede negar que es importante tomar medidas si tu gato tiene sobrepeso. Lo último que quieres es que tu gato sufra una enfermedad grave o cualquier tipo de afección porque tiene sobrepeso. Aunque no se puede negar que poner a dieta a tu gato requerirá un poco de esfuerzo por tu parte, al final merece la pena si protege la salud de tu gato.

Fuentes:



Advertencia: Los consejos proporcionados en esta publicación están destinados a fines informativos y no constituyen un consejo médico con respecto a las mascotas. Para un diagnóstico preciso de la condición de tu mascota, programa una cita con el veterinario.



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Pedro Esteban
Pedro Esteban

Redactor en revistas de temática natural, me encantan los animales y convivir con gatos. ¡Te daré algunos trucos para que tu convivencia con ellos llegue a buen puerto!

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